El 2016 ha sido para nosotros el año del descubrimiento. Y como es de bien nacido ser agradecido, queremos daros las gracias a todos los que habéis hecho posible que durante el 2016 hayamos descubierto cosas que jamás habríamos imaginado, cosas que van más allá de la ciencia.
Hemos descubierto que lo que parece algo imposible, sólo tarda un poco más en llegar, como el descubrimiento de una molécula que elimina los síntomas del alzhéimer en ratones.
Hemos descubierto que la suma de pequeños esfuerzos pueden cambiarle la vida a alguien, como un ARN no codificante que podría servir de diana terapéutica contra diferentes tipos de cáncer, como el de pulmón y mama.
Hemos descubierto que lo que separa al éxito del fracaso es la perseverancia, la misma que nos ha llevado a curar la enfermedad de Wilson en ratones, y esperamos que próximamente, en humanos.
Hemos descubierto que a pesar de no haber llegado aún a la meta, estamos cada día un poco más cerca de ella, formando parte de un estudio internacional de neuronas asociadas a la recompensa que ya ha logrado identificar algunos mecanismos implicados en la interacción del sistema dopaminérgico y colinérgico, ambos relacionados con la aparición de enfermedades neurodegenerativas y psiquiátricas.
Hemos descubierto que la unión hace la fuerza, y hemos firmado un acuerdo con Servier sobre la investigación en Alzhéimer y el Parkinson para profundizar en el estudio de las causas y mecanismos por los que se produce la neurodegeneración.
Hemos descubierto que sólo en el diccionario el éxito va antes que el trabajo, el mismo que nos ha llevado a dar con un biomarcador que pronostica el éxito de la cirugía del cáncer de pulmón.
Hemos descubierto que internarlo, intentarlo de nuevo e intentarlo otra vez, siempre tiene su recompensa, lo que nos ha llevado a identificar que una proteína implicada en la enfermedad de Crohn participa en el desarrollo de un tipo de linfoma, que hasta la fecha no se había asociado con el desarrollo de cáncer.
Hemos descubierto que las grandes alegrías llegan de manera inesperada, y hemos recibido 7,57 millones de euros de la UE y el Gobierno destinados a un proyecto de inmunoterapia contra el cáncer de próstata y ovario.
Hemos descubierto que lo mejor está por llegar.
Bienvenido 2017, te estábamos esperando.