Investigadores del Cima y de la Clínica Universidad de Navarra confirman su eficacia sin efectos secundarios en modelos animales
Investigadores del Cima y de la Clínica Universidad de Navarra, en colaboración con las compañías farmacéuticas Bristol-Myers Squibb y CytomX, han desarrollado un nuevo compuesto de inmunoterapia del cáncer que demuestra ser eficaz y más seguro en modelos animales que los disponibles actualmente.
Desde hace 25 años se sabe que los anticuerpos estimuladores de la proteína CD137 frenan la evolución del tumor en modelos de ratón. Sin embargo, su administración en ensayos con pacientes con cáncer terminal causó casos graves de inflamación del hígado, lo que hizo necesario buscar nuevos abordajes.
En este estudio los investigadores han utilizado un anticuerpo anti-CD137 que solamente se activa en el tejido canceroso. “Esto sucede porque el anticuerpo tiene su sitio activo enmascarado por una secuencia de proteína que se degrada por la acción de unas enzimas que se encuentran casi en exclusividad en la zona tumoral. De este modo, el nuevo anticuerpo solamente se desenmascara y ejerce su función en los tejidos malignizados pero no en los órganos sanos”, explica el Dr. Ignacio Melero, investigador senior del Cima, codirector del Departamento de Inmunología de la Clínica Universidad de Navarra y director del trabajo.
El equipo de científicos ha demostrado que este protoanticuerpo (probody) anti-CD137 ejerce un potente efecto de inmunoterapia frente al tumor sin provocar inflamación en el hígado. Estos hallazgos se han publicado en el último número de Proceedings of the National Academy of Sciences (PNAS), revista oficial de la Academia Nacional de Ciencias de Estados Unidos.
Ventajas de este compuesto
Según el Dr. Melero “dada su seguridad este abordaje permite combinar la estimulación de CD137 mediante este protoanticuerpo con otras inmunoterapias utilizadas ya de forma rutinaria en el tratamiento de pacientes. De hecho, hemos demostrado efectos claramente sinérgicos con los anticuerpos frente al receptor PD-1 y con estrategias de terapia celular adoptiva”.
Por su parte, el Dr. Iñaki Etxeberria, actualmente investigador postdoctoral en el instituto Memorial Sloan Cancer Center de Nueva York y primer firmante del artículo, indica que “quizá la mayor ventaja de estas formas activables de inmunoterapia es que se pueden aplicar en formas menos avanzadas de la enfermedad. De hecho, hemos observado que el tratamiento con este agente tiene una eficacia extraordinaria en ratones en los que extirpamos los tumores tras unos días de tratamiento con este anticuerpo activable en el tejido tumoral. En concreto, hemos descubierto que la respuesta inmunitaria permanece después de la cirugía y es capaz de evitar completamente la recidiva en forma de metástasis”.
El Dr. Melero muestra cautela porque, a pesar de los buenos resultados, se trata todavía de estudios preclínicos. “Sin embargo, la colaboración con estas compañías farmacéuticas hace pensar que esta tecnología se pueda aplicar pronto en ensayos clínicos con pacientes. De hecho, Bristol-Myers Squibb y CytomX colaboran utilizando “probodies” frente a otras dianas de inmunoterapia como CTLA-4 y realizan con ellos ensayos clínicos en los que participan varios hospitales españoles como la Clínica Universidad de Navarra”.
Referencia bibliográfica